En el campo de la tanatología, se abordan distintos aspectos relacionados con el duelo, una experiencia inevitable en la vida de las personas. Una de las dimensiones importantes del duelo es su clasificación, que puede realizarse según diversas características, el desarrollo temporal o la evolución que presenta. En este artículo, exploraremos los tipos de duelo, sus clasificaciones y cómo la tanatología las analiza.
Clasificaciones o tipos de Duelo
Existen varias formas de clasificar el duelo, lo que nos permite entender mejor sus complejidades y matices. En particular, podemos clasificar los duelos según su complejidad, su duración en el tiempo o las características de su evolución.
Tipos de Duelo Complicado
El duelo complicado, según Worden (2022), se divide en cuatro tipos distintos, cada uno con sus propias características:
Duelo Crónico o Prolongado: Este tipo de duelo se caracteriza por su duración excesiva, sin llegar a una resolución satisfactoria, no hay disminución en los síntomas o es muy poca. Las reacciones típicas del primer año tras la pérdida persisten durante años. Cabe destacar que no existen límites de tiempo fijos; sin embargo, una prolongación significativa es un indicador de un duelo no resuelto.
Duelo Retrasado: Este tipo de duelo comparte características con el duelo normal, pero no comienza inmediatamente después de la pérdida. A menudo, comienza semanas o incluso meses después del evento de pérdida.
Lo que caracterisa una reaccion de duelo retrasada es la intensidad de unos sentimientos que cuando se examinan suelen deberse al duelo no resuelto de una pérdida previa (worden, 2022). La reacción emocional previa no fue suficiente y el dolor puede reaparecer más tarde en una pérdida posterior y la intensidad de este duelo parecera excesiva.
Duelo Exagerado: En esta categoría, el dolor del duelo es tan intenso que la persona se siente abrumada y puede recurrir a comportamientos desadaptativos. Las emociones son tan abrumadoras que la persona afectada las considera excesivas e incapacitantes, no pueden funcionar. Podría manifestarse en forma de ansiedad, abuso de sustancias o conductas disfuncionales.
Duelo Enmascarado: Cuando la persona en duelo no puede enfrentar directamente sus emociones o no reconoce que sus reacciones son resultado de la pérdida. Se puede manifestar el duelo a través de mecanismos disfrazados, como enfermedades, síntomas físicos o conductas desadaptativas. En este caso, el doliente no relaciona estas manifestaciones con la pérdida que ha experimentado.
En el duelo exagerado y en el duelo enmascarado, los dos pueden dar lugar a un diagnostico formal psiquiatrico o médico. Sin embargo, en el duelo exagerado, el deudo sabe que los síntomas surgieron en torno al momento de la muerte y son resultado de la pérdida.
Duelo Anticipado y Duelo Ambiguo
Otro tipo de duelo es el duelo anticipado, que ocurre cuando la persona comienza a procesar el dolor de una pérdida que aún no ha sucedido. Este dolor se debe a nuestra capacidad para prever un acontecimiento futuro.
Por otro lado, existe el duelo ambiguo, que abarca dos tipos de pérdidas distintas. En el primer tipo, los dolientes perciben a alguien como ausente físicamente pero psicológicamente presente, como en los casos de secuestros. En el segundo tipo, la persona se percibe físicamente presente pero psicológicamente ausente, como en situaciones de demencia.
El Duelo Desautorizado
El “duelo desautorizado”, duelo silente o prohibido, es un término que describe una experiencia de duelo que no es reconocida ni validada por la sociedad, la cultura o incluso por personas cercanas al individuo en duelo. Esto puede dificultar el proceso de duelo y la recuperación. Algunas situaciones que pueden considerarse como duelo desautorizado incluyen: la pérdida de una mascota, aborto, pérdida de relaciones no matrimoniales, pérdida de empleo o jubilación, entre otras.
En conclusión
La tanatología se sumerge en el estudio de estas clasificaciones de duelo, ayudando a comprender las complejidades emocionales que acompañan a cada tipo. A través de la tanatología, se promueve un enfoque comprensivo y compasivo para apoyar a quienes atraviesan estos procesos de duelo en sus diversas formas.
Bibliografía: Worden, J. W. (2022). El tratamiento del duelo (5ª ed.). Paidós.
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